El inglés Lewis Hamilton (Mercedes), siete veces campeón del mundo de Fórmula Uno, ganó este domingo el debutante Gran Premio de Qatar, donde firmó su séptima victoria del año y relegó al segundo puesto al neerlandés Max Verstappen (Red Bull) -que ahora lidera con ocho puntos de ventaja sobre él- en una carrera nocturna en la que el español Fernando Alonso (Alpine) brilló con extraordinaria fuerza; y el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), acabó cuarto.
El doble campeón mundial asturiano, de 40 años, que tras dos fuera de ella, regresó a la Fórmula Uno con la escudería con la que festejó sus dos títulos (2005 y 2006), recordó al mejor Alonso; y, siete años después de haberlo hecho por última vez, en el circuito de Shanghái, durante el Gran Premio de China de ese año, volvió a subirse a un podio de la categoría reina del motor. El número 98 de su más que brillante carrera. Demostrando, tal y como había explicado a Efe hace unos meses en Austria que «en la F1 no importa la edad, sino el cronómetro».
Acostumbrado a optimizar recursos y más que rápido a la hora de aprender, Alonso no dejó escapar su gran oportunidad en un circuito que debutaba en el calendario y que resultaba desconocido para todos. El genio astur acabó por detrás de los dos pilotos que pilotan en naves de otra división; y que se jugarán el Mundial en las dos últimas carreras del año: en la asimismo debutante Arabia Saudí, dentro de dos fines de semana; y en el cierre de Abu Dabi, el 12 de diciembre.
De momento, ocho puntos hablan a favor de Verstappen, de 24 años -doce menos que su rival británico-, que minimizó daños en Losail con el punto extra que otorga la vuelta rápida en carrera.
En el Mundial más apretado de los últimos años, el humo también sale con fuerza desde los despachos; y hora y media antes de la carrera se anunciaron las sanciones de pérdida de cinco puestos en parrilla a Verstappen y de tres a Valtteri Bottas (Mercedes, retirado este domingo), por no respetar la bandera amarilla durante la calificación del sábado, en el caso del finlandés; y por no hacerlo con doble bandera amarilla, en el caso del capitán de Red Bull.
De tal manera, Verstappen, que iba a salir segundo, bajó al séptimo, Bottas al sexto; y los españoles avanzaron dos puestos: Alonso, quinto en la calificación, salió tercero en Losail; y Sainz, séptimo en la cronometrada principal -y que acabaría la jornada en ese puesto-, quinto.
Las penalizaciones implicaban que el francés Pierre Gasly (Alpha Tauri) avanzase al segundo puesto en parrilla y saliera desde la primera fila junto Hamilton, que el sábado había elevado a 102 su propio récord histórico de ‘poles’ en F1 y este domingo elevó a esa cifra el de victorias; y que fuese otro inglés, Lando Norris (McLaren) el que lo hiciese junto a Alonso en la segunda fila; mientras que Bottas lo haría desde la tercera, al lado de Sainz.
Qatar debutó con éxito en la F1 justo un año antes de que arranque el Mundial de fútbol, de cuya fase final será sede. Por ese motivo, en Losail se dejaron ver, entre otros, el presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino; y astros de la categoría del brasileño Cafú -que levantó la Copa del Mundo en 2002- y del inglés David Beckham.
Todo rotará en torno al Mundial de fútbol el año próximo, pero el tercer país de Oriente Medio en albergar carreras de la categoría reina -el siguiente será Arabia Saudí- volverá a organizar carreras de F1 a partir de 2023 y, como mínimo lo hará hasta 2032; ya que, de momento, tiene firmadas diez más.
Los dos Mercedes, Verstappen y Sainz salieron con el compuesto medio -el empleado en la Q2- mientras que el resto de los primeros diez en parrilla, entre ellos Alonso, lo hicieron con el blando -por idéntico motivo-. Sergio Pérez, eliminado en la segunda ronda y que, por tanto, podía elegir gomas, optó por las medias, al igual que su compañero neerlandés.
Alonso salió bien y, según el plan que avanzó el sábado, adelantó a Gasly a las primeras de cambio, Hamilton mantuvo la primera plaza en la larga recta de Losail -de más de un kilómetro- y Sainz perdió dos; las que ganó ‘Checo’ al principio.
Verstappen ya era cuarto tras el primer giro. Al comenzar el cuarto ya era tercero, tras rebasar al galo de Alpha Tauri, que tampoco opuso, como era de esperar, excesiva resistencia. En la quinta vuelta ‘Mad Max’ superaba al doble campeón mundial asturiano y la cosa volvía a la situación con la que se cerró el sábado: con ‘Sir’ Lewis por delante de su joven rival neerlandés. Abriendo brecha respecto al resto.
Bottas volvió a patinar al principio y era décimo en la décima de las 57 vueltas que se dieron este domingo a la pista situada a unos 20 kilómetros de Doha, la capital del país. Alonso mantenía el tercero; Norris le arrebataba el cuarto a Gasly, supeado poco después por ‘Checo’ ya rodaba quinto en la 13; dos puestos por delante de Carlos.
Verstappen buscó el ‘undercut’ en la 18, en la que efectuó su primera parada, un giro antes que Hamilton, que se ‘cubrió’ de esa manera y regresó a pista, asimismo con duras, por delante del neerlandés. Al que mejoraba en algo más de ocho segundos en la vigésimas, cuando paró el bravo piloto tapatío, que más adelante se las tuvo que ver con el alemán Sebastian Vettel (Aston Martin), que evitó su progresión durante un buen rato.
Alonso entró en garajes en la 24, puso asimismo duras y retornó octavo a pista, entre Leclerc y Ricciardo, al que pasó Pérez dos más adelante.
Carlos puso el duro en la 28, justo antes del ecuador de la prueba; que se atravesó con Hamilton liderando con siete segundos sobre Verstappen -intercambiando vueltas rápidas- y medio minuto respecto a Bottas, que no había parado y rodaba tercero. Pérez había rebasado a Alonso, que era quinto, con siete segundos de ventaja respecto a Gasly.
El finés de Mercedes pinchó en la 35, haciendo creer que el podio sería servido en bandeja a Checo, con Alonso apuntando claramente al cuarto y soñando con un podio que llevaba buscando desde hace «mucho tiempo» y que al final le convirtió en un piloto «muy feliz».
A 15 para meta, Hamilton comandaba con nueve segundos y medio sobre la joven estrella neerlandesa, que paró y cambió a medios, forzando la consiguiente parada, en la 43, del astro inglés, que colocó idénticas gomas y regresó en cabeza a pista. Checo hizo lo propio justo después y Alonso recuperó provisionalmente la tercera plaza, solicitando al equipo que su compañero galo Esteban Ocon defendiese su plaza «como un león» ante el mexicano.
Ocon no pudo con ‘Checo’, pero completó la gran fiesta de Alpine con el quinto puesto final, por delante del canadiense Lance Stroll (Aston Martin). Alonso, que al conocer las sanciones de ‘Mad Max’ y de Bottas había bromeado con Efe, asegurando que se «había quedado una buena noche» sufrió para contener al mexicano. Pero Qatar le hizo justicia a su enorme categoría y el genial piloto asturiano festejó su podio número 98, con su mejor puesto del año. El accidente del canadiense Nicholas Latifi (Williams) no le vino nada mal y un coche de seguridad virtual a falta de tres vueltas ayudó a que, al fin, la suerte cayese del lado de Fernando.
Sainz se tuvo que conformar con el séptimo, pero por delante de su compañero monegasco Charles Leclerc; la jornada en la que Alonso volvió a situar a España en el epicentro del automovilismo mundial.
Verstappen podría ser campeón si gana en Arabia y Hamilton no pasa del séptimo en Yeda. Pero tras la gran noche del astro astur todo parece indicar que el título se decidirá en Yas Marina.